Tuesday, December 27, 2005

II

II

¿Qué dios distraído ha abierto la puerta
de la vieja alacena dónde ya dormían
los vocablos rebeldes?

retornan,
la umbría todavía abierta,
calles abajo hacia la fábrica
de los mitos
-el centinela es ciego
¡qué cerca más mal guardada!-

¿Qué es lo que hace el miedo
velando las cuatro letras,
de vida y muerte y sexo?

El Olimpo inaccesible
no cura soledades.
Afila cuchillos.

0 Comments:

Post a Comment

<< Home